El 25 de febrero de 1920, en la sección de notas del Diario Oficial de la Federación se aprueba… “la creación de un museo postal, que tendrá como finalidad albergar diversos objetos históricos, así como documentos de la época Colonial y algunos otros que por antigüedad fueron considerados reliquias”. A través de esta notificación se pone al Museo Postal de México como uno de los más antiguos en su género, no solo a nivel nacional sino internacional.

La vocación del museo está ligada con la difusión de la historia del correo que data del año de 1580, cuando se establece la figura del Correo Mayor en México por ordenanza Real y la filatelia en México cuyo uso es autorizado a través de Decreto Presidencial emitido el 1 de febrero de 1856 con la finalidad de optimizar el servicio de mensajería, este último rubro adquirió con el tiempo un carácter de coleccionismo. El Museo Postal y Filatélico forma parte del Servicio Postal Mexicano, por ende su acervo sigue en constante crecimiento a través de materiales que entran en desuso pero mantienen un valor intrínseco por la función que tuvieron para el servicio postal; es así que, al día de hoy nuestra colección se conforma por buzones empleados en diversas épocas, apartados postales que fueron de gran uso en épocas pasadas. Así como aditamentos que cuentan la historia de este servicio a lo largo de 441 años.