El Museo Francisco Goitia abrió en 1978, ocupando un edificio rodeado de bellos jardines. En la actualidad es una referencia en el panorama cultural de las artes visuales y en el mapa de los museos de México. El museo alberga una colección permanente integrada por la obra plástica de seis grandes maestros zacatecanos, figuras relevantes en el arte del siglo XX en México y en el mundo. Al genio de Francisco Goitia, se le suman el de Julio Ruelas, José Kuri Breña, Pedro Coronel, Manuel Felguérez y Rafael Coronel. El conjunto de su obra permanente comparte el espacio, donde la obra de Francisco Goitia siempre está presente.

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia

La Lucha

Obra que se distingue por el uso de los colores de las antiguas culturas y recuperación de sus formas y motivos. En 1959 gana el Primer Premio en el I Salón Nacional de Pintura (INBA). En el año 2003 participó en la exposición “Siglo XX, Grandes Maestros Mexicanos” organizada por el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO). En 2005 fue incluida en la exposición “Retrospectiva”, organizada por al Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México y, posteriormente, también se expuso en el Museo Pedro Coronel en Zacatecas.

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia

Retrato de Don Jesús E. Luján
Julio Ruelas

Julio Ruelas elabora con gran maestría el retrato de su mecenas; dicho retrato está adornado con un marco que forma parte de la misma obra, ya que es una extensión del papel tapiz que se encuentra al fondo de la pintura, integrándose perfectamente. A principios del año 2004, el cuadro fue prestado al Museo Franz Mayer para la exposición “Art Nouveau en México”, apareciendo luego en el catálogo de la muestrea. A mediados de 2004 fue prestado al Museo Nacional de Arte (MUNAL) para la exposición “Simbolismo, Artistas con un Alma Visionaria”.

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia

Paisaje con Olivares I

La obra es el resultado de una ortodoxia técnica, compositiva; este cuadro proyecta el ánimo que Goitia experimentaba en esa etapa. Al parecer el artista se encontraba calmado, en paz, reconciliándose con el mundo externo y —sobre todo— con sus torbellinos internos. Ciertas formas dramáticas en las ramas y ciertas sinuosidades en los follajes estuvieron a punto de rebasarlo, de brincarse las trancas, pero Goitia, finalmente, las sometió a un discurso de pausa y reflexión.

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia

Autorretrato
Francisco Goitia

Uno de los gustos de Francisco Goitia era pintarse a sí mismo como personaje histórico; claro ejemplo es el autorretrato “El Moisés”, llamado así por la pose en que está pintado; es una de las obras más conocidas del artista. En el año 2002 participó en la exposición “Autorretratos Mexicanos”, organizada por el Centro de las Artes de Monterrey, apareciendo en el catálogo de la muestra.

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia

Los Peregrinos (Obispos)

Parte de la serie que pone de manifiesto los elementos característicos de su estilo pictórico, la representación de personajes, la teatralidad gestual y ambiental, la ambigüedad del espacio y la expresión de sus rostros. Como el caso de “La lucha”, en 2003 participó en la exposición “Siglo XX, Grandes Maestros Mexicanos” organizada por el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO).

Crédito fotográfico: Alejandro Ramos Rambaud / Museo Francisco Goitia