El Museo Submarino de Arte AC (MUSA o Museo Subacuático de Arte) congrega una colección escultórica de más de 500 piezas de Concreto Marino, que promueven la proliferación de especies marinas y tejido vivo de coral; estas especies ahí han encontrado refugio, transformando las piezas y brindando a los espectadores su arte natural. MUSA se ubica en las diáfanas aguas del Caribe Mexicano, en tres Galerías ubicadas en Manchones (Isla mujeres), Punta Nizuc y Punta Sam (Cancún). MUSA no sólo deleita a sus visitantes: también funciona como descarga del tráfico en arrecifes naturales, propiciando la conservación de los mismos.

Crédito fotográfico: The Stills

Sin Título
Elier Amado Gil
Concreto marino
2.50 x 1.80 m
2015

La pieza muestra a un hombre al desnudo y vulnerable en un acto de autodestrucción; su objetivo es llamar a reflexión, análisis y autocrítica del espectador, ya que nunca antes una sola generación ha tenido que tomar decisiones tan urgentes y definitivas para su prosperidad y sobrevivencia. En este contexto de un presente que se desmorona y de un futuro que todavía hay que inventar o el ser humano se reconcilia con la naturaleza y con él mismo o tendrá que enfrentar, al desnudo, las consecuencias de sus actos.

Crédito fotográfico: The Stills

Diego
Roberto Díaz Abraham
Concreto marino
1.30 x 1.50 m.
2016

Escultura de un niño con una pelota bajo el brazo derecho, mirando hacia arriba. La obra cuenta con corales de cerámica, colocados en la base de la obra.

Crédito fotográfico: The Stills

La Evolución Silenciosa
Jason de Caires Taylor
Concreto marino y corales vivos
4.20 m.
2010

Instalación escultórica monumental que consta de 450 esculturas de forma humana a escala natural. Está diseñada para formar una compleja estructura arrecifal y ser colonizada por la vida marina al estar elaborada con cemento especial. Retrata un conglomerado de gente que representa cómo la humanidad enfrenta asuntos ambientales, y su impacto en el mundo natural. La instalación permite vislumbrar el futuro de forma optimista, manteniendo la esperanza en la unidad, con el fin de enfrentar ese problema.

Crédito fotográfico: The Stills

Bendiciones
Elier Amado Gil
Concreto marino
2.40 x 1.75 x 1.40 m.
2016

Bendecir es una de las más antiguas tradiciones; no se trata, claro está, sólo de una costumbre exclusiva del catolicismo, sino de una enorme variedad de tradiciones culturales. Las bendiciones explicitan, hacen patente, ponen de manifiesto de modo sensible, y en momentos extraordinarios, los deseos de bien o felicidad para quien los recibe y es eso lo que fortalece, lo que anima; el cómo hacerlo dependerá de cada lugar y contexto, pero en todos los casos, se ha de velar porque siga siendo un símbolo.

Crédito fotográfico: The Stills

Antropoceno
Jason de Caires Taylor
Concreto marino
1.30 x 1.50 m.
2010

Réplica de un clásico Volkswagen Beetle, con un pequeño niño acurrucado sobre el parabrisas. La escultura está diseñada, específicamente, para ser habitada por la vida marina; la obra explora el impacto significativo que los seres humanos han tenido en el ecosistema del planeta y sus consecuencias para las generaciones futuras. Su forma aerodinámica y redondeada lo hacen perfectamente adecuado para mantener la estabilidad bajo, y durante, las fuertes corrientes en el mar y las tormentas tropicales.

Crédito fotográfico: The Stills